Tras el fallo judicial que estableció que el agua que ofrece la empresa ABSA a través de la red domiciliaria en la ciudad de Bragado presenta elevados niveles de arsénico, avanza con fuerza la campaña que llevan los usuarios para exigirle a la compañía la realización de obras y la entrega de bidones con agua potable.

La activista Corina Delettieres, quien encabeza el reclamo, señaló al respecto que “resulta extremadamente costoso para la comunidad aceptar que el servicio de agua que se ofrece actualmente no es apto para el consumo humano. Es inadmisible tener que recurrir a comprar agua, cuando ya estamos pagando por un servicio que no cumple con los mínimos requisitos de potabilidad”, en declaraciones al portal BragadoTV.

En ese sentido, Delettieres remarcó que “las obras necesarias para garantizar el acceso al agua potable se han realizado en otras localidades, como 9 de Julio, gracias a la movilización popular. Este tipo de proyectos se logran cuando la comunidad se moviliza, y cuenta con el respaldo de las fuerzas políticas”, y destacó que “en otras ciudades como Chivilcoy, Alberti, Carlos Casares y Mercedes, el avance de plantas potabilizadoras fue posible por la presión ejercida por los vecinos”. Además, explicó que el apoyo se ha ampliado a partidos políticos como La Libertad Avanza, a través de su referente Daniela Monzón, quienes lograron reunir muchas firmas en apoyo a la causa. "Tuvieron que ir casa por casa para obtener las firmas físicas que requería la Defensoría del Pueblo", afirmó Delettieres. 

A pesar de los obstáculos, Delettieres celebró que más de 2.000 vecinos ya hayan firmado el petitorio, lo que permitió sumar a la causa judicial que impulsó Fernando Urriselqui. En cuanto a la respuesta de ABSA, la última novedad es que la empresa habría propuesto instalar puntos fijos con camiones cisterna para abastecer a los vecinos con bidones de agua. Sin embargo, Delettieres señaló que esta medida “no es más que un intento de evitar que la gente continúe firmando el pedido. Es una regresión, un retroceso", afirmó, haciendo hincapié en que la solución no pasa por repartir agua en bidones, sino por garantizar un sistema de agua potable estable y seguro. Por último, Delettieres reiteró que “no hay fecha límite para sumarse a este pedido colectivo, por lo que los vecinos interesados aún pueden firmar el expediente en la Defensoría del Pueblo, que atiende de lunes a viernes de 8 a 14 horas, en el mismo lugar donde anteriormente funcionaba el registro civil”.